TRAS LAS BRUMAS DE LA MENTE HUMANA
Sinopsis: 1954. El agente Teddy Daniels, marshall de los Estados Unidos, es el hombre designado para investigar la misteriosa desaparición de una asesina que se encontraba recluida en una institución psiquiátrica en una remota e inaccesible isla llamada Shutter Island.
Hay casos en los que uno se ve obligado a quitarse el sombrero, y "Shutter Island" (Martin Scorsese,


Tal vez ayuda mucho a la comparativa esa atmósfera casi onírica que pesa en todo momento -en ambos casos-, acompañada por una excelente banda sonora omnipresente pero discreta, severa y acentuada, cadenciosa y rítmica en el momento y lugar justos. Un trabajo tras el que, sin lugar a dudas, no sólo se encuentra la partitura y el arte de Robbie Robertson, íntimo amigo y colaborador del director italoamericano, sino también el propio Scorsese en labores de coordinación. Y a ese ambiente oníric

"Shutter Island" es, en sí misma, una isla de perfección encerrada en sí misma -como su propio nombre indica-. Es un estudio minucioso y detallado del paisaje, no sólo físico, sino también humano, en el que cada paso nos adentra más en las brumas, y parece alejarnos cada vez más de la verdad y de la realidad. Pero ante todo, es un ejemplo que seguir para cualquier cineasta, y una película ineludible para todos aquellos que se consideren amantes del buen cine.